Apoya a refugios que transforman vidas
Cada refugio trabaja incansablemente para rescatar, rehabilitar y encontrar hogares amorosos para perros en necesidad.
El Refugio Operacional OurPawradise nació como una respuesta urgente a la creciente necesidad de un espacio especializado para rescatar, estabilizar y preparar a los animales que más lo necesitan. Comenzó con un pequeño equipo de voluntarios que recorría distintos puntos de la Ciudad de Guatemala respondiendo a reportes de mascotas en peligro o en situación vulnerable. Con el tiempo, el grupo fue creciendo, obteniendo apoyo de comunidades, veterinarios y donantes que compartían un mismo propósito: crear un lugar donde cada vida tuviera una segunda oportunidad. Hoy, el refugio se ha convertido en un centro de operaciones dinámico que recibe, evalúa y brinda cuidados médicos iniciales a perros y gatos rescatados. Aquí se realizan los primeros chequeos, baños, tratamientos, desparasitaciones y evaluaciones de comportamiento que permiten que cada animal reciba la atención adecuada antes de pasar a áreas más tranquilas o ser trasladado al Refugio Administrativo. El Refugio Operacional se ha consolidado como el primer paso para que una mascota transformada por la esperanza pueda empezar su camino hacia un nuevo hogar.
El Refugio Administrativo OurPawradise nació para convertirse en el hogar temporal donde las mascotas rescatadas encuentran estabilidad, cariño y una rutina tranquila mientras esperan a su familia ideal. Tras el éxito del Refugio Operacional y el aumento de animales que lograban recuperarse, surgió la necesidad de un espacio diseñado específicamente para socialización, convivencia y preparación emocional para la adopción. Este refugio abrió sus puertas como un lugar que combina organización, bienestar y comunidad. Aquí cada mascota recibe seguimiento personalizado, sesiones de juego controladas, alimentación adecuada y cuidados constantes; pero sobre todo, recibe afecto humano que le ayuda a confiar nuevamente. El Refugio Administrativo también se convirtió en un punto de encuentro entre adoptantes, voluntarios y mascotas: un espacio donde ocurren las primeras miradas, los primeros paseos y, en muchos casos, el inicio de nuevas historias de vida.

