Lía fue encontrada siguiendo a una banda escolar en un desfile del Centro Histórico. Cada vez que sonaba un tambor, saltaba emocionada como si estuviera dirigiendo el ritmo. Los voluntarios la vieron animando a los niños y se enamoraron de su energía. Ahora en OurPawradise, Lía disfruta de correr, jugar y recibir visitas. Sueña con una familia que ame las aventuras tanto como ella.